COMPAS DE ESPERA
En eso se ha convertido,en un compás de espera,la interminable noche del 7 al 8 de octubre.Una noche demasiado larga.
Mi viernes paso normal;clases por la mañana,trabajo duro por la tarde.Pero una insidiosa sensación se había instalado en mi estomago.Pase la mayor parte del día analizandola,pero nada fuera de lo normal ocurría a mí alrededor.
Cuando salí a las diez y cuarto,pase por casa de Emilio y Sara,que milagrosamente esta cerca de la mía.Una cervecita muy rápida y para casa.Estaba reventada y lo único que quería ver era la cama.
Carlos me llamo a las once menos cuarto,para ofrecerme plan para salir,Ana estaba de uñas y le apetecía hablar con alguien.Le dije que quedaríamos para desayunar,que estaba tan cansada que el insomnio tan habitual en mi no haría aparición...De acuerdo un desayuno por la mañana.
A las doce y media estaba en la cama,con insidiosa sensación o sin ella cai rendida pensando que no tenia que madrugar.
Al rato,mas bien a la hora y media,empezó a sonar el telefono.Me di la vuelta e ignore el persistente sonido de la llamada.Pero el que fuera estaba muy insistente.Al final lo cogi,numero privado y las dos y cinco de la mañana...Aquello no podía ser bueno.
-¿Si?conteste saliendo de mi letargo.
-Hola,buenas noches-voz impersonal al otro lado de la linea-le llamo del Ramón y Cajal...
¿Del hospital?¿Por qué puñetas me llamaban a mi del hospital?
_Nos gustaría que pasara a reconocer...¿Reconocer que?¿Un cadáver?
-A un herido.Según sus datos se llama Carlos Diez y su numero figura en la ultima llamada realizadaSiguió la voz a través de la linea.
-¿Qué le ha ocurrido?la voz me salió pastosa,mientras mi mente desvariaba.Carlos no bebía,y yo había hablado con el hacia unas pocas horas.
-No puedo darle esa informaciónme contestaron.
-Pero...Empece.En valde,la voz del otro lado había colgado.
Me vesti con lo primero que cogí, un vaquero negro y una camiseta de tirantes del mismo color.Mientras llamaba a un taxi mi atribulada mente me dijo que no podía salir así que hacia frió.Cogía la tres cuartas de cuero negro que había dejado en el sillón, enganche el bolso y salí disparada por la puerta.
El taxi me estaba esperando.Dije el destino y me hundí en el asiento,olvidada ya la agradable sensación de mi cama.
Por la ventanilla pasaban las luces de la ciudad y mi mente se paseaba por los recuerdos...El día que aprendí a patinar,el día que gane una competición de gimnasia,mi primer beso,la primera borrachera...Curiosamente en todos aquellos momentos estaba Carlos,No es raro teniendo en cuenta que nos conocemos hace casi 23 años.,o los hará el día de mi cumpleaños.Demasiado tiempo.
Ana me vino a la cabeza.Es su novia,vive con el ,y siempre me ha tenido inquina...Algo mutuo,ella no me soporta por que conozco a Carlos desde hace mas tiempo y nos llevamos muy bien,yo no la soporto por que no deja de echarme indirectas sobre mi vida personal...Después de esto será peor.Me han llamado a mi primero,a mi,a su amiga de 23 años no a ella que tiene 28 y vive con el.Oh si,de esta me odiaria.
Empece a pensar en llamar a los demás:Emilio,Cholo,mis primos...Una lista demasiado larga de gente que nos conocemos desde hace mucho tiempo,desde que nacimos.No por nada ,para contarles lo que ocurría,pero no lo hice.
La recepcionista de urgencias me miro como quien mira a un fantasma,pero me guio hasta Carlos.Estaba en cuidados intensivos,con muchas contusiones y una larga cicatriz desde la sien derecha a la barbilla,producto de un corte con un cristal.Había tenido un accidente de coche,su estado era grave y no sabian si despertaria.
Todos me miraban raro en la sala de espera,mientras llamaba a todos.No entendi el motivo hasta que fui a por café me vi reflejada en un cristal.Una jovendelgada,toda vestida de negro,con la larga cabellera enmarañada,unas descomunales ojeras y completamente palida.Joder es que daba miedo.
Emilio fue el primero en aparecer,junto con Sara y Ana,que me lanzo una mirada enconada.
-Tienes un aspecto horrible.Me dijo Emilio.No le conteste estaba asustada,me abrace a el y me puse a llorar.
-Eh,que tu no lloras nunca.-Me dijo el asustado,el que yo llorara no le dio buena espina.
-Bueno,pero Carlos...-Conteste entre hipidos-Carlos esta muy mal,llevo aquí una hora y nadie dice nada.
Emilio me abrazo y me pregunto:-¿Qué mas han dicho?
-Que volveran a pasar.
-Bueno pues a esperar
Y eso hicimos,esperar en silencio.Mi mente iba y venia siguiendo a Emilio,y las miradas de odio que de vez en cuando me tiraba Ana.
Las tres,las cuatro,las cinco...Y el medico no venia,me estaba empezando a desquiciar.
Me levante de la silla.Tenia que salir de allí,huir del desagradable olor a hospital.
Odio los hospitales,con todo blanco y ese olor a antiséptico.Me ponen nerviosa y enferma.Cogi otro café,sali a la calle y me fume un cigarro.El ascua bailaba con mi nervioso pulso en medio de la fría madrugada.
¿Y si Carlos no despertaba?Por Dios es joven solo tiene 28 años,tiene que despertar.
Y el tiempo siguió pasando,me fui a trabajar en medio del tenso silencio de un grupo que nunca ha sabido estar callado.
Emilio bromeaba,su forma de descargar tensiones,sobre mi aspecto.Decía que Carlos tenia mejor aspecto que yo...Era cierto.
Volví al hospital a las diez de la noche,con dos horas de sueño en el cuerpo.El que mas y el que enos habían dormido algo,todos menos yo.
Empezaba a pensar que las noticias serian funestas cuando un joven medico se presento en la sala y nos llamo.
Ya esta Carlos...Me negba a terminar el pensamiento,me negaba a creer que todo acabaria mal...
Se ha despertadoDijo el medico,y esas palabras se abrieron paso hasta mi conmocionada mente,todo lo anterior y posterior me había resbalado.
Nos guio a una habitación del cuarto piso.Ahí estaba Carlos,con un horrendo vendaje sobre la herida de la cara,pero con su sonrisa de autosuficiencia de siempre,se había despertado y eso era lo importante.
Un nudo me subió por el estomago y para sorpresa de todos,me puse a llorar.
-Vaya al final Maika, lo va a conseguir.-Comento alguien.
Si,al final Maika lo conseguira,pense,pero era maravilloso el milagro acontecido.
Por una vez no sentía que estaba luchando sola contra lo que Maika me advirtió,senti que mis amigos echaban de menos ese duende que tenían antes...Por fin empece a comprender por que el reto de Maika era tan importante para ella.Por fin comprendi su reto...
Se despide por hoy:
Airam,el Ángel Nocturno.
Mi viernes paso normal;clases por la mañana,trabajo duro por la tarde.Pero una insidiosa sensación se había instalado en mi estomago.Pase la mayor parte del día analizandola,pero nada fuera de lo normal ocurría a mí alrededor.
Cuando salí a las diez y cuarto,pase por casa de Emilio y Sara,que milagrosamente esta cerca de la mía.Una cervecita muy rápida y para casa.Estaba reventada y lo único que quería ver era la cama.
Carlos me llamo a las once menos cuarto,para ofrecerme plan para salir,Ana estaba de uñas y le apetecía hablar con alguien.Le dije que quedaríamos para desayunar,que estaba tan cansada que el insomnio tan habitual en mi no haría aparición...De acuerdo un desayuno por la mañana.
A las doce y media estaba en la cama,con insidiosa sensación o sin ella cai rendida pensando que no tenia que madrugar.
Al rato,mas bien a la hora y media,empezó a sonar el telefono.Me di la vuelta e ignore el persistente sonido de la llamada.Pero el que fuera estaba muy insistente.Al final lo cogi,numero privado y las dos y cinco de la mañana...Aquello no podía ser bueno.
-¿Si?conteste saliendo de mi letargo.
-Hola,buenas noches-voz impersonal al otro lado de la linea-le llamo del Ramón y Cajal...
¿Del hospital?¿Por qué puñetas me llamaban a mi del hospital?
_Nos gustaría que pasara a reconocer...¿Reconocer que?¿Un cadáver?
-A un herido.Según sus datos se llama Carlos Diez y su numero figura en la ultima llamada realizadaSiguió la voz a través de la linea.
-¿Qué le ha ocurrido?la voz me salió pastosa,mientras mi mente desvariaba.Carlos no bebía,y yo había hablado con el hacia unas pocas horas.
-No puedo darle esa informaciónme contestaron.
-Pero...Empece.En valde,la voz del otro lado había colgado.
Me vesti con lo primero que cogí, un vaquero negro y una camiseta de tirantes del mismo color.Mientras llamaba a un taxi mi atribulada mente me dijo que no podía salir así que hacia frió.Cogía la tres cuartas de cuero negro que había dejado en el sillón, enganche el bolso y salí disparada por la puerta.
El taxi me estaba esperando.Dije el destino y me hundí en el asiento,olvidada ya la agradable sensación de mi cama.
Por la ventanilla pasaban las luces de la ciudad y mi mente se paseaba por los recuerdos...El día que aprendí a patinar,el día que gane una competición de gimnasia,mi primer beso,la primera borrachera...Curiosamente en todos aquellos momentos estaba Carlos,No es raro teniendo en cuenta que nos conocemos hace casi 23 años.,o los hará el día de mi cumpleaños.Demasiado tiempo.
Ana me vino a la cabeza.Es su novia,vive con el ,y siempre me ha tenido inquina...Algo mutuo,ella no me soporta por que conozco a Carlos desde hace mas tiempo y nos llevamos muy bien,yo no la soporto por que no deja de echarme indirectas sobre mi vida personal...Después de esto será peor.Me han llamado a mi primero,a mi,a su amiga de 23 años no a ella que tiene 28 y vive con el.Oh si,de esta me odiaria.
Empece a pensar en llamar a los demás:Emilio,Cholo,mis primos...Una lista demasiado larga de gente que nos conocemos desde hace mucho tiempo,desde que nacimos.No por nada ,para contarles lo que ocurría,pero no lo hice.
La recepcionista de urgencias me miro como quien mira a un fantasma,pero me guio hasta Carlos.Estaba en cuidados intensivos,con muchas contusiones y una larga cicatriz desde la sien derecha a la barbilla,producto de un corte con un cristal.Había tenido un accidente de coche,su estado era grave y no sabian si despertaria.
Todos me miraban raro en la sala de espera,mientras llamaba a todos.No entendi el motivo hasta que fui a por café me vi reflejada en un cristal.Una jovendelgada,toda vestida de negro,con la larga cabellera enmarañada,unas descomunales ojeras y completamente palida.Joder es que daba miedo.
Emilio fue el primero en aparecer,junto con Sara y Ana,que me lanzo una mirada enconada.
-Tienes un aspecto horrible.Me dijo Emilio.No le conteste estaba asustada,me abrace a el y me puse a llorar.
-Eh,que tu no lloras nunca.-Me dijo el asustado,el que yo llorara no le dio buena espina.
-Bueno,pero Carlos...-Conteste entre hipidos-Carlos esta muy mal,llevo aquí una hora y nadie dice nada.
Emilio me abrazo y me pregunto:-¿Qué mas han dicho?
-Que volveran a pasar.
-Bueno pues a esperar
Y eso hicimos,esperar en silencio.Mi mente iba y venia siguiendo a Emilio,y las miradas de odio que de vez en cuando me tiraba Ana.
Las tres,las cuatro,las cinco...Y el medico no venia,me estaba empezando a desquiciar.
Me levante de la silla.Tenia que salir de allí,huir del desagradable olor a hospital.
Odio los hospitales,con todo blanco y ese olor a antiséptico.Me ponen nerviosa y enferma.Cogi otro café,sali a la calle y me fume un cigarro.El ascua bailaba con mi nervioso pulso en medio de la fría madrugada.
¿Y si Carlos no despertaba?Por Dios es joven solo tiene 28 años,tiene que despertar.
Y el tiempo siguió pasando,me fui a trabajar en medio del tenso silencio de un grupo que nunca ha sabido estar callado.
Emilio bromeaba,su forma de descargar tensiones,sobre mi aspecto.Decía que Carlos tenia mejor aspecto que yo...Era cierto.
Volví al hospital a las diez de la noche,con dos horas de sueño en el cuerpo.El que mas y el que enos habían dormido algo,todos menos yo.
Empezaba a pensar que las noticias serian funestas cuando un joven medico se presento en la sala y nos llamo.
Ya esta Carlos...Me negba a terminar el pensamiento,me negaba a creer que todo acabaria mal...
Se ha despertadoDijo el medico,y esas palabras se abrieron paso hasta mi conmocionada mente,todo lo anterior y posterior me había resbalado.
Nos guio a una habitación del cuarto piso.Ahí estaba Carlos,con un horrendo vendaje sobre la herida de la cara,pero con su sonrisa de autosuficiencia de siempre,se había despertado y eso era lo importante.
Un nudo me subió por el estomago y para sorpresa de todos,me puse a llorar.
-Vaya al final Maika, lo va a conseguir.-Comento alguien.
Si,al final Maika lo conseguira,pense,pero era maravilloso el milagro acontecido.
Por una vez no sentía que estaba luchando sola contra lo que Maika me advirtió,senti que mis amigos echaban de menos ese duende que tenían antes...Por fin empece a comprender por que el reto de Maika era tan importante para ella.Por fin comprendi su reto...
Se despide por hoy:
Airam,el Ángel Nocturno.
1 comentario
Saray -
besos